CAAT y el Ente Cultural entregaron los subsidios del Programa de Fomento Audiovisual 2025

El acto fue organizado por el Consejo de Artes Audiovisuales de Tucumán (CAAT), órgano que impulsa las políticas públicas destinadas al crecimiento del sector en la provincia.

En la Sala Hynes O’Connor del Ente Cultural de Tucumán se llevó a cabo la entrega de subsidios a los ganadores del Programa de Fomento Audiovisual de Tucumán 2025, en el marco de la Ley Provincial Nº 9578 de Promoción de la Actividad Audiovisual.

El acto fue organizado por el Consejo de Artes Audiovisuales de Tucumán (CAAT), órgano que impulsa las políticas públicas destinadas al crecimiento del sector en la provincia.

Promulgada en agosto de 2022, la ley tiene como objetivo fortalecer la industria audiovisual tucumana, fomentando la exhibición, distribución y conservación de obras locales, además de promover la enseñanza del lenguaje y la producción audiovisual en instituciones educativas, hacia la profesionalización y perfeccionamiento del sector.

Los proyectos ganadores:

El Programa de Fomento Audiovisual 2025 incluyó cuatro líneas de apoyo que beneficiaron a realizadores locales.

Subsidio de Desarrollo de Videojuegos:

Proyecto ganador: “Retrato de Identidad”, de Mariana Barcellone.

Monto total: $8.000.000.

Subsidio de Postproducción de Largometrajes:

Proyectos ganadores: “Bravo”, de Gonzalo Villegas, y “La hermandad. 8 años después”, de Martín Falci.

Monto total: $8.000.000 por proyecto.

Subsidio de Postproducción de Cortometrajes:

Proyectos ganadores: “Mínimo”, de Iara Saracho, y “Fuego y Pasión”, de Esteban Pérez Castaño y Branco Gimenez Cinellu 

Monto total: $2.000.000 por proyecto.

Concurso de Distribución de Largometrajes:

Proyecto ganador: “El tiempo entre nosotros”, de Agostina Colantuoni.

Monto total: $1.500.000.

Durante el acto, Humberto Salazar, presidente del Ente Cultural de Tucumán, destacó el valor del programa como parte de una política sostenida de fortalecimiento cultural:

 “Es un día muy importante para la industria audiovisual tucumana. Estamos cumpliendo con la Ley de Fomento, entregando subsidios que impulsan producciones y postproducciones. Esto genera una sinergia entre el Gobierno, los realizadores, la universidad y la escuela de cine. El Estado entiende que esta es una industria que moviliza y dinamiza la economía provincial”. 

A su turno, Juan Carlos Veiga, director de la Escuela Universitaria de Cine y Televisión de la UNT y representante en el CAAT, señaló que esta entrega representa la materialización de una demanda histórica del sector:

 “Esto es la concreción de lo que se viene peleando hace más de diez años: una ley audiovisual provincial con un plan de fomento que colabore con el crecimiento del sector. La industria audiovisual no solo genera empleo, sino que también mueve hotelería, gastronomía y turismo. Y, sobre todo, nos permite mostrar nuestras historias y nuestra cultura al mundo”. 

En la misma línea, Adriana Chaya, directora de Medios Audiovisuales del Ente Cultural y del Consejo de Artes Audiovisuales de Tucumán, celebró el segundo plan de fomento implementado por el CAAT:

 “Esta ley responde a las necesidades del sector. Además de los subsidios, estamos trabajando en una plataforma audiovisual de contenido local y en la segunda temporada del programa Nuestro Cine, que se emitirá por Canal 10, para dar visibilidad a los cortometrajes y videoclips tucumanos”. 

Los realizadores coincidieron en la importancia del acompañamiento estatal para sostener y profesionalizar la producción local.

Los ganadores en la categoría videojuegos, destacaron: “Nuestro proyecto busca promover el arte tucumano y la industria del videojuego, que está en crecimiento y necesita más apoyo. Este incentivo nos permite enfocarnos plenamente en el desarrollo del juego”.

Desde la categoría de cortometrajes, el equipo representante de Mínimo, expresó: “Nuestro corto aborda el acoso callejero y busca visibilizar la violencia de género. Este premio es un orgullo enorme, una alegría y un incentivo para seguir trabajando desde la universidad pública y el talento local”.

Por su parte, Martín Falci, director de La hermandad. 8 años después, sostuvo: “Ganar este empujón es fundamental para terminar la película y que pueda circular. El Estado debe estar presente, porque esa convergencia con los privados es lo que permite que esta actividad funcione”.

Finalmente, Melina Dulci, realizadora tucumana, sintetizó el sentido del programa: “Las películas tucumanas muestran al mundo quiénes somos. Detrás de cada rodaje hay una economía que se mueve: técnicos, actores, hotelería, gastronomía. No es solo entretenimiento, es trabajo y desarrollo local”.